Soy un orgulloso graduado del LCML, estudie alli toda mi vida, y soy lo que soy en primer lugar gracias a mis papas, pero tambien muchas gracias al Liceo, pues aprendi a ser mejor dia a dia.
Nos sentimos felices, tranquilos y orgullosos de que nuestro hijo haga parte de la maravillosa familia Stanford. Un lugar mágico, con personal idóneo en cada perfil, instalaciones de ensueño, y el cariño y amor que se percibe en cada rincón. No nos queda más que darles las gracias por el maravill