Este colegio es un de los pocos en Armenia que aún conservan los valores y la exigencia. Soy ex alumna bethlemita y me siento muy orgullosa de haber pertenecido a esta hermosa comunidad.
El Rector trata de hacer lo mejor, pero los profesores al final del año, pasan por igual a los que han llevado excelentes notas, que a los que van muy mal y sus compotamientos siempre han sido malos o groceros.