Forma a nuestros hijos con temor de Dios, se preocupa por ellos individualmente, los prepara para dar testimonio y para lo más importante..vivir la vida eterna al lado de nuestro Señor. El rector es un hombre conforme al corazón de Dios.
Hay ambiente familiar y espiritual. Se enfoca bastante en el bilingüismo y en llevar a los chicos a estar a la vangauardia en el liderazgo cultural pero con argumentos cristianos sólidos.