El colegio no es perfecto, pero definitivamente excelente. Gran equilibrio entre amor y disciplina con los estudiantes, y énfasis en la vida personal con Dios de cada uno de ellos.
Tiene un carácter integral, cuida los valores que enseñamos en casa y nos enseña a los padres a enfrentar lo que en mi concepto es producto de nuestro descuido. No solo es profesional como colegio, no solo tiene Vocación, alguien muy importante ha hablado muy bien de Beth Shalom y es Dios el Padre: