Soy testigo de lo felices que son mis niños en el colegio, empezaron desde los 4 años, y el mayor esta en 6 grado y el menor en 5to de primaria. Cuando es difícil, a ellos no les importa y estudian con felicidad porque les gusta su colegio. Lo defienden a cal y espada, yo les he dicho que si miráis alguno más fácil jeje.. y ellos me responden que “ni se me ocurra”
Para nosotros como padres es una bendición tener a nuestros hijos en Beth Shalom, por que la vida espiritual de nuestros hijos es lo más importante para nosotros, y como Dios es maravilloso, nos da por añadidura la bendición te también tener la excelencia académica.