Nos une sentimientos de
cariño, agradecimiento, por
la educación, guía y
comprensión hacia las niñas.
Ya nos une medio año y nos
sentimos parte de una familia
maravillosa.
El Gimnasio Campestre Beth Shalom es un lugar seguro donde nuestros hijos crecen no solo en el área académica, sino en el área emocional, social y espiritual. Crecen sabiendo que han sido llamados a transformar su entorno y por esto necesitan una formación especial y diferente.